Por primera vez en generaciones, surge una oportunidad rara en West End Avenue: una mansión impregnada de historia, construida en 1910 con una elegancia intemporal que susurra de otra era. Sus altos techos crean una sensación de grandeza, mientras que los exquisitos detalles de la época hablan de la artesanía de un tiempo pasado. Las habitaciones, con sus generosas proporciones, parecen respirar las historias que han albergado, sus suelos de madera recién refinados brillando como recuerdos pulidos.

Actualmente configurada como siete unidades distintas, cada una conserva el encanto de sus orígenes, siendo un testimonio tanto de la historia como de la adaptabilidad. El edificio tiene un alquiler estabilizado, ofreciendo no solo espacio, sino un ancla en una ciudad donde la constancia es rara. Salga y estará en el corazón de todo; increíbles restaurantes y un vibrante comercio están a pocos momentos, con las principales líneas de metro a solo minutos de su puerta.

Esto es más que una propiedad; es un mundo esperando ser redescubierto, lleno de potencial y la promesa de nuevos capítulos escritos en un lugar que ya sabe cómo albergarlos.

For the first time in generations, a rare opportunity emerges on West End Avenue-a mansion steeped in history, built in 1910 with a timeless elegance that whispers of another era. Its high ceilings create a sense of grandeur, while exquisite period details speak to the craftsmanship of a bygone age. The rooms, with their generous proportions, seem to breathe with the stories they have held, their newly refinished hardwood floors gleaming like polished memories.

Currently configured as seven distinct units, each retains the charm of its origins, standing as a testament to both history and adaptability. The building is rent-stabilized, offering not just space, but an anchor in a city where constancy is rare. Step outside and you're in the heart of everything-amazing restaurants and vibrant shopping are moments away, with major subway lines just minutes from your door.

This is more than a property; it's a world waiting to be rediscovered, filled with potential and the promise of new chapters written in a place that already knows how to hold them.