Salga del ascensor semi-privado y entre en un mundo de elegancia, comenzando con una galería de caliza que lo recibe con los brazos abiertos y una gran escalera que lleva al 13° piso. La sala de estar, un magnífico cuadrado de 27' x 27', cuenta con techos de 18 pies y se inunda de luz natural a través de dos ventanas de guillotina de 12 pies. Molduras de corona y columnas realzan la simetría de la habitación, haciendo de este espacio de doble altura uno de los más elegantes que encontrará en el mercado hoy.

Justo al lado de la sala de estar, descubrirá un comedor redondo adornado con paneles de tela ricos y iluminación empotrada en la cúpula, ideal para cenas íntimas. Oculta justo detrás de uno de esos paneles, encontrará una despensa y una cocina espaciosa y con ventanas, ideal para organizar reuniones inolvidables.

Suba a los dormitorios del 13° piso a través de la escalera de caliza o el ascensor privado que se abre directamente en la galería del piso superior. Aquí, un acogedor den bellamente panelado con puertas empotradas y una chimenea se convierte en su refugio perfecto. Camine por el pasillo hacia los dormitorios y encontrará la amplia suite principal, completa con amplios armarios y una soleada exposición al sur. El baño en suite lo mimará con una gran bañera y una ducha de vapor. Otro dormitorio también cuenta con una ducha en suite, mientras que la oficina en casa incluye su propio pequeño baño con ducha y fácil acceso a la lavandería.

Sumando al encanto, el apartamento cuenta con tres impresionantes chimeneas de mármol, cada una con una línea de gas para un brasero de carbón, fusionando el encanto del viejo mundo con la comodidad moderna.

Construido en 1929, el 322 de la East 57th Street es una joya de caliza neoclásica diseñada por el renombrado arquitecto Harry M. Clauson de Caughey & Evans. El edificio ofrece espacio de almacenamiento, da la bienvenida a mascotas y pieds-à-terre, permite hasta un 50% de financiamiento y tiene un impuesto de transferencia del 3% a ser cubierto por el comprador. Es un hogar que combina historia, lujo y vida moderna en perfecta armonía.

 

Step off the semi-private elevator and into a world of elegance, starting with a limestone gallery that welcomes you with open arms and a grand staircase leading to the 13th floor. The living room, a magnificent 27' x 27' square, boasts 18-foot ceilings and floods with natural light from two towering 12-foot casement windows. Crown molding and columns enhance the room's symmetry, making this double-height space one of the most elegant you'll find on the market today.

Just off the living room, you'll discover a round dining room adorned with rich fabric panels and recessed dome lighting, perfect for intimate dinners. Hidden just behind one of those panels, you'll find a butler's pantry and a spacious, windowed kitchen-ideal for hosting unforgettable gatherings.

Ascend to the 13th-floor bedrooms via the limestone staircase or the private elevator that opens right into the upper floor gallery. Here, a beautifully paneled den with pocket doors and a cozy fireplace becomes your perfect retreat. Walk down the corridor to the bedrooms and you'll find the expansive primary suite, complete with ample closets and a sunny southern exposure. The ensuite bathroom pampers with a large soaking tub and steam shower. Another bedroom also features an ensuite shower, while the home office includes its own small bathroom with a shower and easy access to the laundry room.

Adding to the charm, the apartment features three stunning marble fireplaces, each with a gas line to a coal brazier, blending old-world charm with modern convenience.

Built in 1929, 322 East 57th Street is a neo-classical limestone gem designed by the renowned architect Harry M. Clauson of Caughey & Evans. The building offers storage space, welcomes pets and pieds-à-terre, allows up to 50% financing, and has a 3% flip tax to be covered by the purchaser. It's a home that combines history, luxury, and modern living in perfect harmony.