Escápate a la serenidad en este excepcional refugio en Southold, perfectamente ubicado a orillas del Great Pond. Ofreciendo impresionantes vistas al agua, esta casa frente al mar es el sueño de un amante de la naturaleza. En perfecto estado y lista para mudarse, ha sido diseñada con intención y construida con una calidad inigualable. Cada detalle, tanto en el interior como en el exterior, ha sido cuidadosamente elaborado para maximizar el entorno pacífico y panorámico. Ventanas de gran tamaño enmarcan el estanque, mientras que los acabados de alta gama y materiales premium ofrecen elegancia y comodidad. Un exuberante y profesional paisajismo rodea la propiedad, creando una atmósfera privada, similar a la de unas vacaciones, ideal para relajarse o entretener. Idealmente ubicada a solo momentos de la playa de Kenney y del parque Goldsmith’s Inlet, esta casa ofrece la combinación perfecta de belleza natural y conveniencia costera. Ya sea que busques una escapada de fin de semana o un santuario durante todo el año, esta casa ofrece una rara combinación de lujo y tranquilidad que impresionará incluso al comprador más exigente. No pierdas la oportunidad de poseer un pedazo de paraíso en el North Fork.

Escape to serenity in this exceptional Southold retreat, perfectly perched on the shores of Great Pond. Offering breathtaking water views, this waterfront home is a nature lover’s dream. In mint condition and move-in ready, it has been designed with intention and built with uncompromising quality. Every detail—inside and out—has been thoughtfully crafted to maximize the peaceful, panoramic setting. Oversized windows frame the pond, while high-end finishes and premium materials deliver both elegance and comfort. Lush, professional landscaping surrounds the property, creating a private, vacation-like atmosphere ideal for relaxing or entertaining. Ideally located just moments from Kenney’s Beach and Goldsmith’s Inlet Park, this home provides the perfect blend of natural beauty and coastal convenience. Whether you're seeking a weekend escape or a year-round sanctuary, this home offers a rare combination of luxury and tranquility that will impress even the most discerning buyer. Don’t miss your chance to own a piece of paradise on the North Fork.