Donde el cielo se encuentra con los árboles y el tiempo se detiene

Hay algo especial en el campo: la forma en que la bruma matutina se eleva sobre los campos, cómo el cielo arde en colores al amanecer y se posa en la quietud al atardecer. Ubicada en la privada zona de Woodcock Mountain en Washingtonville, esta clásica casa Cape Cod es más que un lugar para vivir: es donde exhalas, te reconectas y regresas a lo que realmente importa.

Situada en terrenos pacíficos que invitan a quedarte, esta casa captura el ritmo de la vida rural sin sentirse remota. Despierta en habitaciones bañadas por el sol y con el sonido del canto de los pájaros. Disfruta de tu café en la terraza trasera mientras la luz dorada filtra a través de los árboles. Las noches son mejor pasarlas en el patio, donde el cielo se desvanece de rosa a índigo y el aroma del verano permanece en el aire.

En el interior, el encanto es igualmente acogedor. Pisos de madera cálidos, un diseño de fácil circulación y un dormitorio principal en el nivel principal crean una comodidad que se siente sin esfuerzo. En el segundo piso, dormitorios adicionales ofrecen justo el espacio adecuado—para invitados, para trabajar o para soñar.

La naturaleza nunca está lejos aquí. Ciervos deambulan al anochecer, búhos llaman desde las copas de los árboles y las estrellas—intactas por las luces de la ciudad—te recuerdan cuán expansiva puede sentirse la vida. Y cuando busques aventura, estarás cerca de senderos para caminar, bodegas, instalaciones de arte y destinos de fin de semana—todo a solo 60 millas de Nueva York.

Ya sea que busques una escapada a tiempo completo, un refugio de fin de semana o simplemente una manera más tranquila de vivir, esta casa ofrece algo raro: una belleza que no necesita ser perseguida. Se levanta con el sol, reposa con las estrellas y te da la bienvenida a casa.

Where the Sky Meets the Trees, and Time Slows Down

There’s something about the countryside—the way the morning mist rises over the fields, how the sky blazes with color at dawn and settles into stillness at sunset. Tucked in the private Woodcock Mountain area of Washingtonville, this classic Cape Cod home is more than a place to live—it’s where you exhale, reconnect, and return to what really matters.

Set on peaceful grounds that invite you to linger, this home captures the rhythm of rural life without feeling remote. Wake up to sun-drenched rooms and the sound of birdsong. Enjoy your coffee on the back deck as golden light filters through the trees. Evenings are best spent on the patio, where the sky fades from pink to indigo and the scent of summer lingers in the air.

Inside, the charm is just as inviting. Warm hardwood floors, an easy-flow layout, and a main-level primary bedroom create comfort that feels effortless. Upstairs, additional bedrooms offer just the right amount of space—for guests, for work, or for dreaming.

Nature is never far here. Deer roam at dusk, owls call from the treetops, and the stars—untouched by city lights—remind you of just how expansive life can feel. And when you do crave adventure, you're close to hiking trails, wineries, art installations, and weekend destinations—all just 60 miles from NYC.

Whether you’re looking for a full-time escape, a weekend retreat, or simply a quieter way of living, this home delivers something rare: beauty that doesn't need to be chased. It rises with the sun, rests with the stars, and welcomes you home.