Un Santuario en el Cielo en el Centro

Situado por encima de la vibrante energía del centro, este luminoso hogar de una habitación ofrece impresionantes vistas, total privacidad y un moderno estilo de vida refinado en uno de los barrios más dinámicos de Manhattan.

Con una impresionante línea de visión de casi 60 pies que se extiende de un extremo al otro del apartamento, esta residencia está impregnada de luz natural de tres exposiciones: norte, sur y este. El resultado es una rara sensación de amplitud y apertura, realzada por ventanas de doble cristal que enmarcan vistas del horizonte perfectas para una postal desde The Village hasta el World Trade Center. Un suelo de bambú sólido y ecológico, encimeras de cuarzo y gabinetes a medida crean una mezcla perfecta de sostenibilidad y sofisticación, mientras que persianas eléctricas controladas a distancia brindan un control de ambiente sin esfuerzo.

Diseñado para una flexibilidad moderna, la amplia sala de estar ha sido ingeniosamente adaptada para incluir un espacio extra versátil—ideal como oficina en casa o refugio para huéspedes—con elegantes puertas corredizas de cristal. Aunque se pueden quitar fácilmente para restaurar el diseño original abierto, esta cuidadosa adición mejora la funcionalidad sin comprometer el flujo o el diseño.

El edificio apto para mascotas mejora la experiencia con un portero a tiempo parcial, superintendente residente, lavandería en el lugar y un garaje, ofreciendo tanto estabilidad como conveniencia.

Fuera, lo mejor del centro te espera: restaurantes renombrados, transporte fácil y vibrante vida urbana. Esta es la vida en Nueva York en su máxima expresión—elevada, sin esfuerzo y exclusivamente tuya.

A Downtown Sanctuary in the Sky

Set above the vibrant energy of downtown, this luminous one-bedroom home offers breathtaking views, total privacy, and refined modern living in one of Manhattan’s most dynamic neighborhoods.

With an impressive nearly 60-foot sightline stretching from one end of the apartment to the other, this residence is drenched in natural light from three exposures—north, south, and east. The result is a rare sense of airiness and openness, enhanced by double-paned windows that frame postcard-perfect skyline views from The Village to the World Trade Center. Eco-conscious solid bamboo flooring, quartz countertops, and custom cabinetry create a seamless blend of sustainability and sophistication, while electric remote-controlled blinds provide effortless ambiance control.

Designed for modern flexibility, the expansive living area has been cleverly adapted to include a versatile bonus space—ideal as a home office or guest retreat—with elegant glass-paneled sliding doors. While easily removed to restore the original open layout, this thoughtful addition enhances functionality without compromising flow or design.

The pet-friendly building enhances the experience with a part-time doorman, live-in super, on-site laundry, and a garage, offering both stability and convenience.

Outside, the best of downtown awaits—renowned restaurants, easy transportation, and vibrant city life. This is New York living at its finest—elevated, effortless, and exclusively yours.