Knight Homestead está ubicado en uno de los lugares más extraordinarios y tranquilos de la región. A lo largo de la línea de propiedad, una serie de cascadas crea lo que podría ser la característica de agua más espectacular que se pueda imaginar, tanto visual como sonoramente. La parcela de 5 acres está limitada por dos lados por tierras de conservación de águilas calvas protegidas por el DEC, lo que garantiza una privacidad duradera y una conexión rara con la naturaleza virgen. El suave flujo del agua se puede escuchar desde la casa durante todo el año, siendo un compañero constante que se asienta en el fondo como una canción favorita. Justo más allá de las cascadas, el río Mongaup fluye suavemente, y un encantador sendero comienza a unos minutos de la puerta de entrada. No se ven otras casas. El camino termina en un callejón sin salida justo después de la entrada. Desde casi cualquier ángulo, este lugar se siente como un secreto.

Construida originalmente en 1856, la casa de campo fue restaurada cuidadosamente en 2014. La renovación respetó el pasado del hogar mientras integraba comodidades modernas. Se colocaron pisos de madera de tablones anchos en todo el lugar, y ahora las paredes están revestidas con tablones de madera, dando a los interiores una textura limpia y clásica.

El área principal de estar es abierta y acogedora, anclada por una chimenea de propano y enmarcada por una estantería empotrada y un gran televisor de pantalla plana arriba. El acogedor sofá es un gran lugar para disfrutar de una serie o una película. Una gran mesa de comedor asienta cómodamente a ocho, perfecta para cenas grandes o pequeñas. La cocina se extiende a lo largo de la parte trasera de la casa, con dos áreas distintas. En un extremo, un banco empotrado bajo amplias ventanas es el lugar perfecto para el café de la mañana, con almacenamiento oculto debajo. El extremo opuesto cuenta con una estufa Bosch, aparentemente acres de encimeras de madera de cerezo y extensos armarios tanto arriba como abajo. Una ventana sobre la placa de cocción ofrece una vista del patio más allá.

Fuera del espacio principal de estar, un patio interior de cuatro estaciones ofrece un espacio cálido e íntimo. Con paneles de madera natural en las paredes y el techo, un suelo de piedra de campo, y ventanas panorámicas grandes enmarcando el jardín y los árboles, es un lugar de ensueño para leer, establecer un espacio de trabajo o disfrutar de un té caliente en un día de invierno. Una puerta conduce al patio de comedor trasero, facilitando las comidas al aire libre, ya sea que estés asando a la parrilla o sacando víveres de la cocina.

En el segundo piso, una cama empotrada en el rellano hace un perfecto rincón para escribir o tomar una siesta. Un escritorio agrega utilidad para aquellos que aprovechan para trabajar entre aventuras. La habitación más grande de las dos tiene una sensación elevada con excelente luz y un techo abovedado, mientras que la segunda ofrece vistas hacia el garaje y las cercanas cascadas. El baño completo está hermosamente terminado, con un lavabo doble de mármol, una profunda bañera de hidromasaje, paredes de azulejos tipo metro, una ducha cerrada de vidrio y grandes baldosas de pizarra azul.

El sótano cuenta con un baño completo y un área adicional para dormir. Hay dos juegos de lavadoras/secadoras en el lavadero. Un refrigerador para vino mantiene tus mejores cosechas a la temperatura correcta.

El patio trasero es algo mágico. La bañera de hidromasaje de madera de cedro y alimentada por leña invita a ser disfrutada. Enmarcada por una pared de pizarra y rodeada de una plataforma de madera, armoniza maravillosamente con el tema de madera, piedra y agua de la casa. Es difícil resistirse. El columpio de cuerda se mece suavemente cerca de la mesa de picnic. Luces de cuerda flotan y brillan sobre la fogata elevada. De noche, la ausencia de contaminación lumínica permite que las estrellas brillen con una claridad asombrosa. Magia.

Al otro lado del estrecho camino se encuentra el garaje de dos plazas, completo con electricidad. Es lo suficientemente espacioso para dos vehículos con espacio sobrante para un taller, estudio de música o un espacio artístico. Las áreas loft en cada extremo brindan aún más posibilidades. Justo fuera de la ventana trasera se encuentra una de las cascadas, fluyendo eternamente. El constante movimiento del agua y el sonido, reconfortante y primitivo, parece llegar al sistema nervioso y activar una válvula de liberación de presión.

Sal de la puerta principal y gira hacia el río, y encontrarás el sendero que lleva a la joya principal: una cascada ancha, alta e inspiradora. Escala su lado rocoso y deja que el agua te bañe.

Knight Homestead is tucked into one of the most quietly extraordinary spots in the region. Along the property line, a series of cascading waterfalls creates what might be the most spectacular water feature imaginable, both visually and sonically. The 5-acre parcel is bordered on two sides by protected DEC bald eagle conservation land, ensuring enduring privacy and a rare connection to untouched wilderness. The soothing rush of water can be heard from the house year-round, a constant companion that settles into the background like a favorite song. Just beyond the falls, the Mongaup River flows gently, and a lovely walking trail begins about a minute from the front door. No other homes are visible. The road dead-ends just past the driveway. From nearly every angle, this place feels like a secret.

Originally constructed in 1856, the farmhouse was thoughtfully restored in 2014. The renovation respected the home’s past while integrating modern comforts. Wide-plank wood floors were laid throughout, and wood shiplap now clads the walls, giving the interiors a clean, classic texture.

The main living area is open and inviting, anchored by a propane fireplace and framed by a built-in bookshelf and a large flatscreen TV above. The cozy couch is a great place to enjoy a series or a movie. A large dining table easily seats eight, perfect for dinners large or small. The kitchen wraps along the rear of the home, with two distinct areas. At one end, a built-in bench beneath wide windows is the perfect perch for morning coffee, with hidden storage beneath. The opposite end features a Bosch range, seemingly acres of cherry wood countertops, and extensive cabinetry both above and below. A window above the cooktop offers a view of the patio beyond.

Off the main living space, a four-season indoor patio offers a warm and intimate space. With natural wood paneling on the walls and ceiling, a fieldstone floor, and oversized picture windows framing the yard and trees, it’s a dreamy spot to read, set up a work station, or take in hot tea on a winter day. A door leads to the back dining patio, making meals outdoors a breeze, whether you’re grilling or bringing out victuals from the kitchen.

Upstairs, a built-in daybed on the landing makes a perfect writing nook or nap spot. A desk adds utility for those sneaking in work between adventures. The larger of the two bedrooms has a lofty feel with excellent light and a vaulted ceiling, while the second offers views toward the garage and the nearby falls. The full bath is beautifully finished, with a marble double vanity, deep soaking tub, subway-tiled walls, a glass-enclosed shower, and oversized bluestone floor tiles.

The basement has a full bathroom and an overflow sleeping area. There are two sets of washer/dryers in the laundry room. A wine refrigerator keeps your favorite vintages at the correct temperature.

The backyard is kind of magical. The cedar, wood-fired hot tub beckons. Framed by a bluestone wall and surrounded by wood decking, it harmonizes beautifully with the home’s theme of wood, stone, and water. It’s hard to resist. The rope swing gently sways near the picnic table. String lights hover and glow over the raised fire pit. At night, the lack of light pollution allows the stars to shine with breathtaking clarity. Magic.

Across the narrow road is the two-bay garage, complete with electricity. It’s roomy enough for two vehicles with space left over for a workshop, music studio, or art space. Lofted areas at each end provide even more possibilities. Just outside the back window is one of the waterfalls, forever flowing. The constant movement of the water and the sound, soothing and primal, feels like it reaches into the nervous system and hits a pressure release valve.

Walk out the front door and turn toward the river, and you'll find the trail that leads to the crown jewel: a wide, tall, awe-inspiring waterfall. Climb up its rocky side and let the water wash over you. © 2025 OneKey™ MLS, LLC